En Colombia, aproximadamente un tercio de los alimentos destinados a consumo humano se despilfarra, de esa cifra, la Región Central representa el 39% del total anual, lo que equivale a cerca de 3.8 millones de toneladas de alimentos (DNP, 2015).

Bogotá, D.C., 9 de febrero de 2023. La Región Administrativa y de Planificación Especial (RAP-E) junto con las entidades LOGYCA y AGROSAVIA vienen adelantando el programa ´Gestión compartida de Pérdidas y desperdicios’ a través de dos proyectos piloto desarrollados en Boyacá y Cundinamarca, respectivamente, con el objetivo de promocionar el aprovechamiento de buenas prácticas en etapas de cosecha, poscosecha, almacenamiento, transporte y comercialización de productos.

“Dentro de la estrategia de sostenibilidad del Plan de Abastecimiento Alimentario, en la RAP-E buscamos promocionar el uso de estas buenas prácticas. Estamos seguros que una muy buena práctica puede reducir ostensiblemente el daño de los productos”, afirmó Jorge Eduardo Aya, coordinador del eje de Infraestructura de Transporte, Logística y Servicios Públicos.

Con el piloto de separación de residuos orgánicos desarrollado en la Plaza de Mercado del Sur en Tunja (Boyacá) se busca implementar y mejorar las estrategias en el manejo de productos y aprovechamiento de residuos orgánicos, a través de tres temáticas fundamentales: gestión de residuos, gestión de inventarios y, manejo de empaque y embalaje.

Para el boyacense Andrés Roa, beneficiario y recolector del desperdicio orgánico, estas prácticas, sin duda, ayudarán a la diminución de los porcentajes de pérdidas que se generan en las cadenas alimentarias de las regiones. “Cerca del 90% de los desperdicios sirven como alimento para mis animales, el 10% restante lo usamos en lombricultura o compostaje, especiales para obtener humus y sacar cultivos orgánicos de frutas y verduras para nuestro propio provecho”.

El segundo piloto, desarrollado en los municipios de Sibaté, Facatativá y Fómeque (Cundinamarca), tiene como objetivo principal identificar las causas de las pérdidas presentes en las cadenas de abastecimiento, particularmente en los puntos críticos, ya que cerca del 50% de las pérdidas de alimentos se generan por el manejo inadecuado de los productos en la cosecha. Para tal fin, se realizaron diagnósticos en las etapas de cosecha, poscosecha (acondicionamiento, selección, lavado, empaque) y transporte de productos hortofrutícolas, como la fresa y el tomate, teniendo en cuenta sus características fisicoquímicas, nutricionales y de inocuidad.

Se espera que estas acciones sean replicadas en todos los territorios asociados a la Región Central y así promover cadenas productivas que puedan ser potencialmente desarrollables, permitiendo disminuir las cifras de pérdidas y desperdicios, al tiempo que sirva de plataforma para que productores de esta zona del país se vinculen a nuevos mercados agrícolas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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