Este miércoles 22 de febrero se desarrolló la primera sesión conjunta entre el Concejo de Bogotá y la Asamblea de Cundinamarca, con el fin de determinar acciones sobre el abastecimiento y la seguridad alimentaria en la Bogotá Región. Algunas de las conclusiones incluyen eliminar la intermediación y generar una mejor política de abastecimiento.
Los concejales y diputados le pusieron el ojo a cómo se encuentra la seguridad alimentaria en Bogotá y Cundinamarca, y al cómo se puede solventar tras la creación de la Región Metropolitana.
Según las cifras, en 2022 más de 1 millón de toneladas de comida entraron a la capital desde el departamento, lo que aportó el 44 % de lo que se consume en la ciudad, sin embargo, este porcentaje no garantiza una buena alimentación.
“Hay que tener más vitrinas y más espacio comercial para las organizaciones campesinas y productoras rurales, es decir, que ellos puedan seguir trayendo productos a mayor escala a Bogotá”, manifestó María Fernanda Rojas, concejal de Bogotá por el partido Alianza Verde.
Entre las soluciones, también se plantea mejorar la comercialización y producción de los cultivos.