La ambientalista Pilar Forero, del Colectivo Laguna de Fúquene, compartió en su intervención en el marco de la Cumbre Mundial de Biodiversidad de la ONU, que se llevará a cabo en Cali del 21 de octubre al 1 de noviembre, las propuestas que los colectivos sociales de Boyacá presentarán en la conferencia.
Forero destacó que, entre las metas que llevan a la COP16, se incluyen 12 iniciativas clave que han sido trabajadas desde diferentes regiones del país, incluyendo Barranquilla y Valle del Cauca. Estas metas, presentadas ante la ONU y el Tratado de Escazú, exalta el papel fundamental de la mujer campesina, reivindicando la ruana como un símbolo biocultural de la región, no solo político, que representa a uno de los departamentos más fríos de Colombia.
La visión de la mujer, especialmente de las campesinas, será central en las propuestas que se presenten. «Llevamos una línea llamada ‘la ruta para las mujeres ante la COP16’, que involucra a unas 300 mujeres campesinas que, desde sus territorios, han protegido áreas como el Nevado del Cocuy y el Páramo de Sumapaz», explicó Forero. También, se resaltarán las contribuciones históricas de las mujeres Muisca y guaqueras, quienes enriquecen la cultura del Occidente de Boyacá.
Además de los temas de género y la cultura, Forero enfatizó la importancia de una propuesta legal que busca que el ecocidio sea reconocido como un delito dentro del Código Penal. «Vamos con una propuesta de un bloque especial ante la Corte Penal Internacional, para que el ecocidio se convierta en un crimen», destacó.
Otro de los temas urgentes que se llevarán a la cumbre es el problema del agua, que afecta a varias regiones del departamento. Boyacá ha estado trabajando en la protección de sus fuentes hídricas, con foros con gobiernos de Brasil, Argentina y Chile, y más de 700 acciones populares en el departamento. Forero subrayó que el racionamiento de agua no es una solución viable, y advirtió que las políticas de pozos profundos no son la respuesta para enfrentar la crisis hídrica que enfrenta la región.
Pilar Forero también hizo un llamado al gobernador de Boyacá para que se involucre activamente en el diálogo con el Gobierno Nacional sobre la gestión de las reservas hídricas en el departamento, enfatizando que la preservación de estos ecosistemas es fundamental para asegurar el bienestar de los habitantes, especialmente de Tunja.
En cuanto a la Laguna de Fúquene, Forero recordó el camino recorrido en la defensa de este ecosistema vital para Cundinamarca y Boyacá. A través de acciones populares, se ha solicitado al Estado implementar planes de acción que protejan las fuentes hídricas de la región, ya que aún persisten falencias en la optimización de acueductos y plantas de tratamiento de agua potable.
«Vamos a buscar recursos en la COP16 para proteger las zonas especiales, pero también exigir que se ejerzan acciones concretas para salvar ecosistemas como la Laguna de Fúquene, el Lago de Tota, y otras áreas que requieren atención urgente», concluyó Forero. La propuesta más destacada será declarar estos territorios como patrimonio biocultural y ambiental a nivel mundial, consolidando una red de protección que garantice su conservación para las futuras generaciones.
Tomado de: Caracol Radio
