Casi 1.000 productores agropecuarios del sur de Boyacá y también de algunas zonas del norte de Cundinamarca se congregan en el ‘Grupo Público Valle de Tenza’, un canal de telegram que nació hace casi 3 años para contrarrestar la crisis económica que en ese momento originaba la pandemia.
Ruth Novoa, coordinadora de la Oficina de Extensión Agropecuaria de la Alcaldía de Sutatenza, puntualizó que este canal de Telegram se formalizó gracias a la buena voluntad de cada uno de los hombres y mujeres que se dedican a la producción agropecuaria en la región, y luego de muchos mercados campesinos que se cumplen sin falta cada domingo en ese municipio.
“Empezamos a convocar a todos los productores inicialmente a través de la radio, pero luego empezamos a usar también las plataformas digitales para publicar cada semana los productos que cada campesino traía al mercado”, agregó.
Y quizás sin percatarse, con este canal los campesinos crearon una ambiciosa estrategia que hoy convoca a 900 personas de esa región de Boyacá para sostener la economía de cada entidad territorial del extenso y siempre productivo Valle de Tenza, una región en la que convergen diferentes pisos térmicos propicios para la cosecha de muchos alimentos.
La plataforma virtual de mensajería instantánea ha sido tan útil para estas personas, que allí no solo se maneja un intercambio comercial de productos agrícolas y pecuarios, sino que también se ofertan bienes y servicios, se publican ofertas académicas y de capacitación que dicta el SENA, se informa sobre la actualización de precios, y hasta se divulgan imágenes de mascotas que se entregan en adopción, para las fincas, o para las casas del perímetro urbano de cada localidad.
“Con el confinamiento que generó la pandemia, desde la Administración Municipal empezamos a incentivar a los productores a descargar la aplicación y a que se fueran uniendo a este canal, en un primer momento lo logramos porque con el cierre de las plazas de mercado en cada pueblo, resultó ser un canal estratégico para que ellos vendieran y no perdieran sus cosechas”, describe Ruth.