Las energías renovables no convencionales son un camino clave para hacer frente al cambio climático. Llevar a cabo las transformaciones que exige el mundo es una tarea compartida y Colombia cuenta con un gran potencial para convertirse en referente, sobre todo, en la producción de energía solar.
Según el estudio realizado por la Comisión de Integración Eléctrica Regional (CIER), la Universidad Jorge Tadeo Lozano y la Unidad de Planeación Minero- Energética (UPME), en el año 2030 Colombia consumirá 30 % de energías limpias o renovables no convencionales, en cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 7, el cual busca garantizar acceso universal a electricidad asequible.