82% del suministro de los víveres que se necesitan para sustentar a los habitantes de la ciudad provienen de otros territorios
La RAP-E Región Central y la Secretaría de Desarrollo Económico de Bogotá adelantaron la Mesa Territorial para la Formulación del Plan de Abastecimiento Alimentario de la Región Central, en la que participaron productores, gremios, empresarios, representantes de la academia y comercializadores, quienes construyeron de manera conjunta las propuestas para tener un sistema de abastecimiento de calidad, eficiente y sostenible.
A 2030, Bogotá podría pasar de 7´200.000 personas a más de 9 millones debido no solo al crecimiento de su población sino al fenómeno de la migración; sin embargo, el 82% del suministro de los víveres que se necesitan para alimentar a los habitantes de la ciudad provienen de otros territorios del centro del país, lo que representa un gran desafío para la capital.
“Hemos recorrido todos los territorios que hacen parte de la región central, escuchando a los actores de la cadena de abastecimiento alimentario. Con este encuentro en Bogotá, logramos establecer las preocupaciones y propuestas que incluiremos en el Plan para mejorar las capacidades de nuestra capital”, indicó Fernando Florez, Gerente de la RAP-E.
Estrategia
Por su parte Fabiola Yáñez, subdirectora de Abastecimiento de la Secretaria Distrital de Desarrollo Económico, manifestó que el 50,2% de los hogares bogotanos no cuentan con la cantidad de alimentos que requieren, “y por eso desde la Administración distrital estamos comprometidos con la implementación de esta estrategia que nos permitirá mejorar la seguridad alimentaria de nuestros ciudadanos”.
La capacidad de producción de la zona rural de Bogotá en todo un año es equivalente al requerimiento de 1 día y medio de las operaciones que realiza la central de Corabastos, lo que se traduce en 18.000 toneladas de alimentos, por lo que la capital vive una baja capacidad de autosuficiencia alimentaria.
Es por ello que, para incrementar la posibilidad de autoabastecimiento, los productores participantes propusieron facilitar la legalización de predios rurales; crear un fondo financiero regional para el abastecimiento destinado a pagar de contado a los productores, y una red de agricultores urbanos con enfoque de producción limpia y agroecológica, además de generar herramientas que permitan información permanente de producción y consumo, entre otras iniciativas.
Frente al desafío de garantizar que los alimentos lleguen de manera oportuna y de mejor calidad a los bogotanos, se propuso la activación de plataformas logísticas y centros de distribución en Bogotá y la región de manera articulada, involucrando a consumidores y tenderos distritales.
“Para nosotros es muy importante este Plan porque en Corabastos aproximadamente se comercializan de 9.000 a 12.000 toneladas de alimentos a diario y eso implica una planificación muy dispendiosa que comienza desde el productor, hasta nosotros que hacemos parte de la cadena de comercialización”, sostuvo Enrique León, Jefe de Planeación de Corabastos.
La producción agrícola
De acuerdo con el DANE en la zona rural de Bogotá existen casi 16.869 personas, es reducida la base poblacional, y hay bajas tasas de natalidad; en el caso de las mujeres se redujo la participación del 17,9 % en el grupo de 10 a 19 años a 11,4 % entre 20 y 29 años y para el caso de los hombres, de 18,2 % a 12,5%.
La pésima movilidad, la flota de transporte obsoleta y el estado de las vías encarecen el producto y hace poco atractivo ingresar mercancía a la ciudad. Así mismo, 1´228.783 Toneladas de alimentos se desperdician en Bogotá, el 34,76% de los desperdicios del país de acuerdo con lo reportado por el Departamento Nacional de Planeación, DNP.
Del área rural de Bogotá, cerca del 45,2% (72,7 mil Habitantes) tienen problema de conflicto; específicamente el 21,1 % (33,8 mil Habitantes) tienen problemas de obras civiles y urbanas (7% por sobreutilización y 6,4 % por subutilización).
Las papas son el principal cultivo con 6.787 toneladas, seguido de la lechuga con 1.508; la habichuela, con 1.119 y la coliflor con 835 Toneladas. Y por último, los niveles de producción de CO2 de Bogotá son los mayores de la región Central: 38.2 Millones de toneladas. La ciudad está en máximo nivel de riesgo climático.