El proyecto de adaptación al cambio climático que se desarrolla en el lago de Tota, liderado por el Ministerio de Ambiente, ha dejado buenos resultados a más de 6.000 personas del área de influencia del espejo de agua. La iniciativa tiene tres componentes que permiten la investigación, el desarrollo de información, la incorporación de criterios de variabilidad y cambio climático en instrumentos y políticas de ordenamiento territorial, así como la implementación de medidas de adaptación en beneficio del sector agropecuario y la comunidad en general.
El proyecto es financiado por el Fondo Mundial Para el Medio Ambiente (GEF), liderado por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y ejecutado por el Consorcio para el Desarrollo Sostenible de la Ecorregión (Condesan). En Colombia, se implementa en conjunto con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.