El pasado sábado el Gobierno nacional y la Federación Nacional de Ganaderos, Fedegán, firmaron el acuerdo de compra de 3 millones de hectáreas dentro de la política de reforma agraria que adoptará este gobierno para permitir a los campesinos acceder a la tierra en varias regiones del país.
Así las cosas, el Gobierno nacional podrá hacer la compraventa directa de este número de hectáreas de tierra a personas del sector ganadero que voluntariamente deseen venderlas.
Sobre la firma de este acuerdo, Luis Eduardo Arias, gerente del Comité de Ganaderos del Meta, dijo que: “Todavía falta mucho por hacer, pero sentimos que esto es una manera de enfrentar un problema difícil de falta de tierras en el país, ya que los campesinos son los más afectados con esta situación, que se debe resolver en un tiempo prudente”.
En cuanto a la compra de tierras que planea hacer el Gobierno nacional, Arias dijo que:: “Nosotros aspiramos a que parte de esas hectáreas de tierra que planea comprar el gobierno sean adquiridas en el Meta, pero por ahora tendremos que esperar a ver qué zonas del país son elegidas por el Gobierno nacional para desarrollar este acuerdo”.
En el departamento del Meta, según Luis Eduardo Arias, hay 8 millones de hectáreas de tierra útiles. De esta cifra, los ganaderos de la región tienen disponibles cerca de un millón de hectáreas para vender al Gobierno nacional.
“Estas hectáreas están distribuidas en diferentes municipios del Meta, y pueden ser muy bien aprovechadas por los campesinos de esta región del país, ya que esta región tiene una vocación agrícola y ganadera, que le permitiría al gobierno nacional desarrollar los propósitos que busca alcanzar con la reforma agraria”, indicó gerente del Comité de Ganaderos del Meta.
De otro lado, el directivo indicó que la compraventa directa de tierras que planea hacer el gobierno a los ganaderos del país, solucionaría la invasión de tierras que se presenta en diferentes zonas de Colombia, incluido el departamento del Meta.
No obstante, recordó que el acuerdo firmado entre el Gobierno nacional y Fedegán establece que los tres millones de hectáreas de tierra que serán adquiridas por la Nación deben ser acreditadas como propiedad privada conforme a la ley, no tener ningún proceso agrario en curso ni medidas de protección y cumplir con las disposiciones ambientales y agrarias y las condiciones ecológicas.
Adicionalmente, los predios deberán estar saneados en términos fiscales y con posesión en manos desus propietarios.