La familia boyacense y visitantes disfrutaron de grandes eventos realizados en diferentes escenarios ubicados en Tunja, en el que la literatura, danza, música y cine fueron los grandes protagonistas de la jornada matutina.
Ilustremos el FIC en literatura
En el Paredón de los Mártires, carpa Fiilboy, se desarrolló el taller de escritura y dibujo denominado ‘Creación de mini libro ilustrado’, encabezado por la escritora e ilustradora mexicana Abril Castillo, dirigido a ilustradores y dibujantes.
En el taller se realizaron ilustraciones y se crearon historias, además participaron personas interesadas en el arte y la literatura.
“Me parecen muy importantes estos eventos en donde se vincula toda la comunidad en espacios públicos y fuera también del centro, porque luego todo ocurre en las grandes ciudades y es bonito que se mueva la cultura para todos», apuntó Abril Castillo.
A su turno, se llevó a cabo el taller de narrativa sesión 2 ‘Corrección y edición de cuentos’ con el docente, escritor y editor Oscar Daniel Campo.
La escritura es una construcción que se puede mejorar y transformar a través del trabajo colectivo e individual, por eso los espacios representativos abren las puertas al público general para que participen y muestren sus expresiones artísticas.
«Los talleres están pensados para que cualquier persona pueda participar, es importante lo que está pasando aquí en la región, y agradezco mucho la oportunidad que me dan en este y otros espacios porque creo que es precisamente a través de los mismos y talleres, no solo el mío, sino todos los que hay, que se pueden consolidar los campos literarios y creativos y se pueden crear procesos que a largo plazo produzcan circulación de libros, obras y que se consoliden desde la región y para la región», afirmó Óscar Campo.
El FIC se escribe y se dibuja en todas las áreas, la bandera de la cultura se mantiene viva y participativa.
Un derroche de amor
Grandes muestras dancísticas, musicales y artísticas desarrollaron los niños, niñas y adolescentes del programa FIIC Sin Límites, quienes derrocharon todo su talento en la tarima de la Plaza de Bolívar.
Allí, los asistentes vibraron con la brillante presentación musical de los artistas Jonnatan Andrés Alba, de Cucaita, y Guillermo Andrés Urrego, de Santa María.
Posteriormente, la danza se tomó el escenario con la presentación de la artista Ayelen Camila Sosa Acosta del municipio de Turmequé, quien estuvo acompañada por su bailarín Camilo José, en una fusión llena de alegría y mucha música.
Mientras que la participación estelar estuvo a cargo de los bailarines Óscar y Sofía Chivito del municipio de Siachoque, con danzas cargadas de buena energía y diversidad. Vale la pena indicar que todos estos artistas son ganadores del Festival de Inclusión Infantil FIIC Sin Límites.
La jornada en la “sala” de la capital boyacense se adornó con la presentación artística del grupo de formación cultural ‘Mochila de sueños’, en las modalidades de danza y música, quienes llenaron de fantasía, color y buen ritmo el escenario, llevándose los aplausos del público.
Un particular súper héroe, que se ha ganado los corazones de todos los colombianos gracias a sus canciones dirigidas al cuidado y protección del medio ambiente, se robó el show en el Festival de la Cultura 2022.
Se trata del Frailejón Ernesto Pérez, quien, con su espectacular presentación, en la que desplegó toda su energía, felicidad y conciencia ambientalista, puso a pensar a los más de 2.000 personas que asistieron sobre la labor que debemos cumplir para evitar un desastre ecológico y los cuidados que debemos tener con los residuos que se generan en diversos aspectos.
Más que un personaje mágico, el Frailejón Ernesto Pérez es un ejemplo de la manera en la que se puede utilizar la internet como una herramienta para compartir conocimientos y transmitir mensajes positivos.
Familias enteras no solo aprendieron del cuidado del agua, las fuentes naturales, el reciclaje y nuestros páramos, sino que también bailaron, cantaron y se divirtieron de principio a fin.
Con plaza llena, el circo cautivó a propios y visitantes
Picasso alguna vez dijo que el propósito del arte es lavar el polvo de la vida cotidiana de nuestras almas, y eso nos lo demostró el Festival Internacional de la Cultura a través de Circo al Parque, ‘Ríe, Vive y Sueña’, Circo Teatro Roni, Kortocirquito y Carlitos Mararay.
El Circo Teatro Ronide Duitama, se especializa en las artes circenses, además de ser las ganadoras de la Convocatoria del FIC, al igual que la Compañía Amero Mararay con el personaje ‘Carlitos Mararay’, un hombre burlesco, festivo y chancero que le recuerda a las personas adultas y adultos mayores la alegría de vivir.
El fuego es uno de los elementos que nos brinda la madre tierra y Kortocirquito nos lo recordó con el arte de malabarear y contar historias representando la identidad de los Muiscas con sus tradiciones y hazañas. Los artistas se apropiaron de la historia representándola con el equipo especializado para sus malabares y show manteniendo el hilo conductor de la misma, dejando al público fascinado con esta gran fusión.
La cultura es la única que puede salvar el pueblo, con la bondad y el compartir experiencias a través de las artes y el FIC, que se ha encargado de reunir a los diferentes grupos poblacionales en espacios soñados, creativos y trascendentales.
Le echaron el cuento a los tunjanos
Esta jornada dominical del Festival Internacional de la Cultura se vivió con muchas sorpresas para los amantes de la cuentería, ya que tuvo la participación de cinco artistas en escena, quienes por medio de su cuentos e historias colmaron de risas a las más de 30 personas que acudieron al Paredón de los Mártires.
Celso de Jesús Guerrero Castro, Clara Nelly Alfonso, Nelson Humberto López López, Freddy Ayala, El Parcero del Popular No. 8 (Medellín) llenaron de alegría a los niños, jóvenes, adultos y adultos mayores que asistieron al evento.
“Fui bendecido al ser ganador de la Convocatoria Somos FIC en el área de narración oral, y me siento muy contento con la gran acogida que tuvimos, la buena interacción con ellos con los que estuvimos evocando las coplas, dichos, tradición oral, poesía costumbrista, el amor criollo y, en fin, esas vivencias que nos hacen diferentes”, dijo Celso Guerrero.
El cine sigue cautivando
Los espacios alternativos que rodean al Festival Internacional de la Cultura como el Bosque de la República, han plasmado grandes historias en esta versión. Una de ellas fue la proyección de la película cubana ‘Inocencia’, dirigida Alejandro Gil.
Esta cinta, que cuenta la historia de varios estudiantes de primer año de Medicina que son encarcelaos por soldados españoles por una injusta acusación, pero solo ocho de ellos fueron víctimas de un inesperado desenlace. Después de dieciséis años en los que Fermín Valdés Domínguez, amigo y compañero de celda de las víctimas, ha luchado por demostrar la inocencia de aquellos jóvenes, una nueva pista lo acerca a la clave que desentrañaría la verdad oculta.
La historia, basada en hechos reales ocurridos en 1871, narra aquellos estremecedores sucesos que condujeron a los acontecimientos más dramáticos y sensibles de la Habana del siglo XIX, conmovió a os espectadores que se apostaron en la carpa del Paredón de los Mártires.
Esta extraordinaria filmación proyectadará el jueves 10 de noviembre en el Teatrino Francisco de Paula Santander de Sogamoso, a partir de las 6:00 de la tarde.
Los conciertos calentaron la jornada
La lluvia y el frío cobijaron la tarde/noche de conciertos estelares en la carpa central ubicada en la plaza de Bolívar de la ciudad de Tunja. Kumbande Orquesta, SANO Orquesta (ganadora de convocatoria FIC), Sin Fronteras Orquesta, Blezz traphic y 24k se presentaron de manera magistral ante más de 2000 personas.
Cerrando con mucho sabor, el Grupo Caneo produjo que los asistentes al concierto movieran sus caderas al ritmo de la mejor salsa con temas como: Qué haré sin ti, Quién piensa en ti, Dime, déjala, De punta a punta, Para amarnos más, entre otros, hicieron frente al frío que acompañó esta jornada de la versión 49 del Festival internacional de la Cultura.
Por otra parte, en el auditorio Eduardo Caballero Calderón se desarrolló el concierto ‘Un piano, mi voz y el viento’, que se vio amenizado por el ensamble Escaramuza, que, con un recorrido por la música de la costa y del Pacífico colombiano, hicieron que el público al son de las palmas, le hicieran cuna al clima de la capital boyacense, y así darle paso al ganador del Festival Ópera al Parque, Guillermo Barón, quien con su magistral interpretación le dio el toque clásico a la noche que se cerró con la presentación de Karen Picón y Fredy Pinzón, un dúo de clarinete con piano y un sutil canto lírico, que, despidió con honores, la tarde/noche de conciertos estelares.
