La Federación Nacional de Cafeteros catalogó al Tolima como el departamento que más apoyo le brinda a la caficultura con inversiones por más de 40.000 millones de pesos, para obtener una mayor producción, mejorar la calidad y aumentar los ingresos de más de 60.000 familias que cultivan el grano en 39 municipios.
“Tolima es el número uno en ese propósito, son más de $40.000 millones invertidos por el gobernador, Ricardo Orozco, para mejorar la vida de las familias cafeteras y posicionar el grano en los mercados internacionales”, afirmó Roberto Vélez Vallejo, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros.
En la siembra y renovación de cafetales envejecidos, el gobierno departamental viene invirtiendo 11.000 millones de pesos en 39 municipios, pero el año entrante ese programa contará con 5.000 millones de pesos más, y los recursos se ejecutan mediante convenios con el Comité Departamental de Cafeteros y la Federación Nacional.
La noticia es positiva ya que Tolima tiene 110.000 hectáreas cultivadas por más de 60.000 familias que derivan su sustento de este producto que aflora en municipios como Planadas, Ataco, Líbano, Rioblanco, Chaparral, Fresno, Ibagué, Cunday, entre otros, pero lo llamativo es que el 90 por ciento del área sembrada es resistente a la Roya.
“Somos el tercer departamento en producción de café a nivel nacional”, afirmó el gobernador del Tolima, Ricardo Orozco, y agregó que esta cadena productiva genera más de 80.000 empleos directos y 200.000 indirectos en cosecha, poscosecha y otros procesos.
Otra estrategia es el proyecto Innovacafé que tiene una inversión de 16.000 millones de pesos para temas de ciencia, tecnología e innovación. Beneficiará a 900 familias cultivadoras en 20 municipios y la meta es producir café de alta calidad con el mejoramiento de los procesos de secado.
Omar Julián Valdés, secretario de Desarrollo Agropecuario del Tolima, afirmó que la renovación de los cafetales es una estrategia que se desarrolla para que los cultivos no envejezcan, ya que después del 8 octavo año de producción los árboles alcanzan alturas elevadas con quiebres en sus ramas lo que produce daños al entrecruzarse unas con otras.
“Las inversiones tienen como objetivos fortalecer y darle sostenibilidad a la caficultura regional”, dijo el funcionario, quien agregó que el convenio entrega a las familias cultivadoras $200 por árbol de café renovado y $300 por nueva siembra.
Gildardo Monroy, director ejecutivo del Comité de Cafeteros, señaló que el departamento tiene todos los pisos térmicos, con lo que más de 60.000 familias se dedican a producir café en zonas que van desde los 1.000 hasta los 2.300 metros de altura sobre el nivel del mar.
