• El convenio interadministrativo de $60.300 millones permitirá implementar acciones de restauración ecológica, fortalecimiento comunitario y gestión sostenible del agua en los ecosistemas estratégicos de la cuenca alta del río Bogotá.

Bogotá, D. C., 21 de noviembre de 2025. La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Región Administrativa y de Planeación Especial (RAP-E) Región Central consolidaron una alianza estratégica que marca un gran logro en la gestión ambiental del centro del país.

El convenio interadministrativo, con una inversión de $60.300 millones tiene como propósito aunar esfuerzos técnicos, administrativos y financieros para implementar acciones de restauración y conservación participativa orientadas al fortalecimiento de la conectividad ecosistémica y la gestión integral del recurso hídrico en la cuenca del río Bogotá y contribuir a la implementación del Plan de Seguridad Hídrica de la Región Central.

El gerente (e) de la RAP-E Región Central, Edwin Giovani García Másmela, resaltó que el acuerdo constituye una apuesta integral por restablecer la conectividad ecosistémica en el corredor de páramos de Guerrero y Chingaza, proteger y conservar servicios ecosistémicos asociados al agua, restaurar áreas degradadas y fortalecer a las comunidades que habitan y gestionan estos territorios.

Por su parte, el director general de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros Alarcón, destacó: “Seguimos fortaleciendo la gobernanza ambiental de la ciudad – Región. Por eso la CAR Cundinamarca y la RAP-E Región Central firmamos un convenio destinado a la restauración y conservación de ecosistémicas estratégicos en la cuenca alta y media del río Bogotá. Esta iniciativa representa una inversión en recursos de los cuales $60.000 millones son recursos de la CAR y $300 millones de la RAP-E, consolidando una de las alianzas más importantes en materia de restauración ecológica del país”.

Un convenio que contribuye a la recuperación del territorio y fortalecer a las comunidades

El acuerdo se orienta a implementar acciones integrales de restauración y conservación participativa, con un enfoque territorial y comunitario. Esto implica la recuperación de coberturas naturales, la protección de nacimientos y cuerpos de agua, el fortalecimiento de prácticas sostenibles y la consolidación de capacidades locales para garantizar la sostenibilidad ecológica y social.

Las áreas de intervención fueron definidas a partir de diagnósticos biofísicos y socioambientales priorizados por la CAR y la RAP-E, en sectores donde convergen ecosistemas estratégicos necesarios para la regulación hídrica, la biodiversidad y las capacidades de los ecosistemas para adaptarse al cambio climático.

Cabe resaltar que el convenio incorpora un componente de fortalecimiento comunitario y de gobernanza ambiental que busca consolidar redes locales de restauradores y promotores ambientales, formar gestores y líderes rurales, crear espacios de diálogo y participación territorial, y fortalecer mecanismos de comunicación comunitaria que aseguren la sostenibilidad a largo plazo de las acciones.

Con esta alianza, la CAR y la RAP-E reafirman su compromiso con la restauración ecológica, la adaptación al cambio climático y la protección del agua como eje fundamental del desarrollo regional para la seguridad hídrica de Bogotá – Cundinamarca consolidando un modelo de gestión participativa que beneficiará a las comunidades rurales y a los ecosistemas estratégicos de la cuenca del río Bogotá.

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